Avance: Fiat Uno Matic (1983)

A muchos conductores les molesta manejar la palanca de cambios y cuando conducen en ciudad reniegan de su existencia. Para este amplio grupo de usuarios se vislumbran ya una fecha, mediados del 84, y un coche, el Fiat Uno-Matic 70, como punto final para sus sufrimientos.

Este coche, el Fiat Uno­Matic equipa la revolucionaria transmisión de variación continua; en definitiva, una caja de cambios con todas las ventajas de la caja automática -facilidad de manejo, ausencia de pedal de embrague, etcétera-sin ninguno de sus inconvenientes -mayor consumo de carburante, más lentitud de respuestas, etcétera-.

Las virtudes del Uno-Matic 70 se resumen así:· prestaciones casi idénticas a las del modelo gemelo equipado con la caja manual de cinco velocidades; ausencia de saltos bruscos entre una y otra relación -el coche aumenta su velocidad de forma progresiva, sin ningún tirón-, menor fatiga para el conductor, que puede olvidarse de la palanca de cambios y del embrague; consumo casi igual al de una caja manual.

Al comparar el modelo ahora presentado con el Uno 70 S, provisto de cambio manual con cinco velocidades, se obtienen los mismos resultados, no sólo a velocidad constante de noventa kilómetros por hora -cinco litros en ambos casos-, sino también en ciclo urbano -8,2 litros en los dos casos-. Las prestaciones del Uno-matic son algo inferiores a las del manual, más o menos un 10 por 100, pero, sin embargo, el Uno-matic se recupera con más alegría y, por tanto, facilita la conducción en ciudad.

El futuro más próximo del Uno pasa, también, por la palabra mágica: turbo. El Uno Turbo de gasolina, con 105 caballos de potencia, golpeará con fuerza en el campo de los pequeños deportivos, mientras el Uno Turbo Diésel, con 60 caballos, será un rival de primera línea en la categoría de los pequeños Diésel.

Motor 16 nº 2